Señor Dios todopoderoso, fuente de toda bendición, hoy me acerco a Ti con fe y esperanza, pidiéndote que derrames tu gracia sobre mi vida económica. Tú que alimentas a las aves del cielo y no dejas que falte lo necesario a los que confían en ti (cf. Mt 6,26), abre para mí los caminos de la abundancia y de la prosperidad. Dame la sabiduría para administrar lo que me das, la constancia para trabajar con esfuerzo y el corazón agradecido para reconocer tu amor en cada detalle.
Virgen Santísima de Guadalupe, Madre querida y protectora de tu pueblo, cúbreme con tu manto de ternura e intercede por mí ante tu Hijo Jesucristo. Pídele que bendiga mi trabajo, mis proyectos y mis decisiones, para que nunca falte el pan en mi mesa ni la alegría en mi hogar. Madre, que la abundancia llegue a mi vida no solo en lo material, sino también en la paz, la fe y el amor que tanto necesitamos.
Hoy elevo mi súplica unido a la Iglesia, rezando el Padre Nuestro, el Ave María y el Credo de los Apóstoles, pidiendo que tu bendición transforme mi vida en prosperidad y abundancia.
Table of Contents
Súplica para abrir caminos de prosperidad
Señor, guía mis pasos y dame la fuerza para trabajar con alegría. Que cada esfuerzo tenga fruto y que mi labor sea fuente de bendición para mí y para los míos. Aparta de mi vida toda dificultad económica, toda deuda injusta y toda puerta cerrada. Ábreme caminos nuevos y dame la confianza de que tu Providencia nunca falla.
Cuando la preocupación intente robarme la paz, acompáñame en la oración para enfrentar momentos difíciles, y cuando la fe se tambalee, dame la fuerza para sostenerme en la oración para fortalecer la fe. Quiero vivir con la certeza de que contigo, Señor, todo es posible.
Reflexión bíblica: la abundancia viene de Dios
La Escritura nos recuerda: “El Señor es mi pastor, nada me falta” (Sal 23,1). Padre bueno, enséñame a confiar en esta promesa y a reconocer que toda abundancia viene de ti. No permitas que el egoísmo o la avaricia se adueñen de mí; al contrario, dame un corazón generoso para compartir lo que recibo. Que mi prosperidad económica no sea solo para mi beneficio, sino también para bendecir a los demás.
También está escrito: “La bendición del Señor es la que enriquece” (Prov 10,22). Haz que mis manos trabajen con justicia, que mis palabras siempre sean honestas y que mis ganancias estén limpias de toda injusticia. Así, mi prosperidad será verdadera y duradera, porque estará fundada en tu amor.
Oración por la abundancia en el hogar
Virgen de Guadalupe, bendice a mi familia y a todos los que amo. Te pido que nunca falte lo necesario en nuestra casa: salud, trabajo, alimento y paz. Que nuestro hogar sea un lugar de unidad, donde reine la fe y el amor. Que la abundancia que recibamos sea motivo de gratitud y de generosidad con quienes más lo necesitan.
Me uno con fe a la oración para proteger a los seres queridos, confiando en que bajo tu manto nuestras vidas estarán seguras. Y si alguna carga económica pesa demasiado, quiero ponerla en tus manos con la confianza de que tú me acompañas en cada paso.
Jaculatorias para pedir prosperidad y abundancia
“Señor, bendice mi trabajo y mis esfuerzos.”
“Virgen de Guadalupe, abre caminos de abundancia en mi vida.”
“Jesús providente, que nada falte en mi hogar.”
“Virgen Morena, cúbreme con tu manto de prosperidad.”
“Señor, dame prosperidad para compartir con los demás.”
Acción de gracias por la abundancia recibida
Gracias, Señor, porque aun en los momentos de necesidad siempre encuentro tu mano generosa. Gracias por el alimento en mi mesa, por el techo que me cubre y por la oportunidad de trabajar cada día. Gracias por las bendiciones que muchas veces no veo, pero que sé que están presentes en mi vida.
Quiero vivir con un corazón agradecido, reconociendo que todo lo que tengo viene de ti. Por eso, me uno a la oración para agradecer un milagro, sabiendo que cada paso de prosperidad que doy es fruto de tu amor.
Cómo rezar esta oración
1) Escoger un lugar tranquilo y encender una vela, ofreciendo el momento a Dios.
2) Hacer la señal de la Cruz y dar gracias por lo que ya se tiene.
3) Rezar el Padre Nuestro, el Ave María y el Credo.
4) Orar con fe la súplica de prosperidad, entregando las preocupaciones económicas.
5) Rezar una decena del Santo Rosario, pidiendo abundancia y prosperidad.
6) Terminar con un acto de gratitud, reconociendo que todo es don de Dios.
Oración final
Señor, pongo en tus manos mi vida económica. Bendice mi trabajo, abre las puertas que necesito y haz que todo lo que haga prospere. Virgen de Guadalupe, acompáñame siempre con tu amor maternal y enséñame a vivir con confianza y gratitud. Que mi vida se llene de abundancia y prosperidad, no solo en lo material, sino también en la fe, la salud y el amor. Amén.

















