Virgen Santísima, tengo una entrevista cercana y los nervios se asoman. Quiero hablar con claridad, escuchar con atención y mostrar, sin exagerar, quién soy y cómo puedo servir. Te ofrezco mis horas de preparación y te pido serenidad.
Madre de Guadalupe, ordena mis ideas, ayúdame a recordar ejemplos concretos y dame prudencia para responder sin prisa. Que mi mirada sea honesta y mi actitud respetuosa. Si no sé algo, que lo diga con humildad; si me equivoco, que se note mi capacidad de aprender.
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Oración principal
Intercede para que la conversación fluya con respeto y verdad. Que mis logros se entiendan en su justa medida y que mis límites no me asusten. Si esta oportunidad es para mí, que el camino se confirme; si no lo es, que salga con paz y con una lección valiosa.
Confianza en el momento
Dame confianza para respirar antes de contestar, para escuchar la intención detrás de cada pregunta y para cuidar mis palabras. Ayúdame a convertir la tensión en concentración y el miedo en impulso sereno. Quiero dejar una huella de verdad y colaboración.
Agradecimiento
Gracias por el simple hecho de ser considerado. Gracias por quienes me recomendaron, por el tiempo de quien me entrevistará y por la posibilidad de crecer, pase lo que pase. Amén.
Amén.
(Rezar un Padrenuestro, un Avemaría y un Gloria)
